La histórica Bodega Norton, con 130 años de trayectoria y fundada en Luján de Cuyo, Mendoza, en 1895, anunció que se presentó en Concurso Preventivo de Acreedores. La compañía enmarcó esta decisión, de alto impacto en el sector, como una estrategia proactiva para asegurar su futuro en plena crisis.
La empresa detalló que la medida se tomó específicamente "para asegurar los puestos de trabajo y la continuidad de la operación", buscando negociar la deuda con sus acreedores bajo supervisión judicial y evitar una posible quiebra.
La justificación del CEO: estrategia y compromiso
Tomás Lange, CEO de Norton, fue el encargado de comunicar la decisión y ponerla en contexto. El directivo señaló que la solicitud fue la mejor alternativa tras "evaluar distintas alternativas de solución a la situación financiera de la compañía". El mensaje de la compañía fue enfático en destacar su compromiso con la continuidad del negocio:
- Puestos de Trabajo: el objetivo central es mantener las fuentes de empleo.
- Trayectoria: Norton reafirmó que "continuará trabajando con el mismo espíritu de esfuerzo y excelencia que la caracteriza desde hace 130 años".
- Mercado Global: la bodega destaca que seguirá creando sus vinos, desde varietales hasta blends de alta gama, manteniendo su presencia en más de 72 países.
El contexto desafiante de la industria del vino en Mendoza
La decisión de una bodega de esta magnitud refleja el escenario complejo que enfrenta la industria vitivinícola en Argentina, marcado por problemas macroeconómicos, inestabilidad financiera y una caída generalizada en el consumo. Según datos del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV):
- En los primeros nueve meses del año, la venta de vino al mercado interno cayó un 2,5 por ciento.
- Las exportaciones tuvieron una baja del 6,3 por ciento en el mismo período, en comparación con el año anterior.
El contexto se agrava por el análisis del consultor Javier Merino, quien destacó que la clave para la rentabilidad argentina es "vender menos cantidad a un precio mayor" y la necesidad de "innovar en forma constante" para competir en la góndola global. La crisis toca directamente a Mendoza, ya que el 90,4% del vino comercializado en el mercado interno proviene de la provincia, lo que subraya la relevancia de la medida adoptada por Norton.