La casa de la modelo Valeria Mazza fue blanco de los delincuentes quienes saltaron un paredón para ingresar a su mansión ubicada en el partido de San Isidro durante la tarde del miércoles. Su esposo Alejandro Gravier llevó tranquilidad tras el intento de robo y dijo que los ladrones no se llevaron nada.
Según informó Agencia Noticias Argentinas, la modelo fue víctima de delincuentes que planeaban una modalidad escruche, un robo que se caracteriza por la falta de moradores dentro de la vivienda. Actualmente, Mazza y algunos miembros de su familia están en Europa.
En tanto, en el programa Arriba América, de America TV contaron que un hombre joven ofrece servicios de jardinería y en ese momento por detrás de la vivienda ingresaron unos cuatro delincuentes.
En la casa se encontraba la hija de Valeria Mazza junto a a una amiga y empleados, quien comenzó a gritar cuando vio ingresar a los delincuentes, logrando ahuyentarlos y frustrar el robo, contaron en ese programa.
Alejandro Gravier dio detalles del intento de robo
En tanto, poco después en el programa Desayuno Americano, por el mismo canal, Alejandro Gravier, esposo de la modelo contó que los delincuentes "no se llevaron nada" y que "gracias a dios no pasó a mayores".
Gravier añadió que su hija "esta bien. La contuvimos. Había mucha gente dentro de la casa".