En un comunicado, Javier Milei dijo que la liberación de Nahuel Gallo es "prioridad" para su Gobierno.
El Gobierno negocia con Venezuela para liberar a Nahuel Gallo, el gendarme apresado hace más de un año.
Tras la liberación de cinco ciudadanos venezolanos que se encontraban asilados en la Embajada de Argentina en Caracas fueron finalmente rescatados, el Gobierno nacional anunció que siguen las gestiones para repatriar a Nahuel Gallo, el gendarme que sigue en custodia de las autoridades venezolanas.
Gallo, de origen catamarqueño, es cabo primero y suboficial, miembro del Escuadrón 27 de la Gendarmería Nacional, y ejerció sus funciones en Uspallata.
Ingresó a territorio venezolano desde Colombia, por el Puente Internacional Francisco de Paula Santander. El 27 de diciembre de 2024, y fue apresado por el gobierno venezolano, quien lo acusa de ser un espía.
En un comunicado emitido por la Oficina del Presidente (OPRA), Milei destacó la relevancia de la cooperación con los aliados internacionales y aseguró que el caso del gendarme argentino permanece como una prioridad absoluta para su administración.
“Seguiremos trabajando de manera firme y coordinada para garantizar la liberación de Nahuel Gallo. No descansaremos hasta lograrlo”, expresó el documento.
Mientras Argentina busca soluciones diplomáticas, el gobierno de Estados Unidos continúa negociaciones con Venezuela en un intento por asegurar la liberación de presos políticos.
En este contexto, el expresidente Donald Trump presiona para la liberación de ciudadanos estadounidenses detenidos, lo que abrió un complejo escenario de intercambio de detenidos entre los países.
El caso de Gallo volvió a generar preocupación después de la publicación de un video en enero donde se lo veía en el penal El Rodeo, un centro de detención en el estado de Miranda, a las afueras de Caracas. Esa imagen, sin sonido y sin precisiones oficiales, fue la última referencia concreta que se tuvo sobre el gendarme argentino.
Hasta el momento, no se han revelado detalles sobre su estado de salud ni su ubicación actual, aumentando la incertidumbre sobre su situación.
Las gestiones diplomáticas continúan y los gobiernos involucrados mantienen esfuerzos en busca de acuerdos que puedan garantizar la seguridad y libertad de los detenidos. La comunidad internacional sigue de cerca los acontecimientos, atentos a posibles avances en esta tensa disputa diplomática.