El Rally Dakar se quedó sin dos protagonistas clave en un par de días. Es que Sébastien Loeb y Carlos Sainz desertaron de la competencia que se realiza en Arabia Saudita tras sufrir duros accidentes que dañaron la estructura de su máquinas.
El francés, a bordo del Dacia, dio varias vueltas tras perder el control de su auto en el kilómetro 12 de la tercera especial. Tanto el múltiple campeón de WRC, como su navegante, salieron ilesos del incidente, lo repararon y siguieron en competencia. Perdieron más de una hora por lo ocurrido, pero al llegar al campamento recibieron la noticia de que no podían continuar por decisión de la FIA.
Mediante un comunicado en los canales de comunicación del Dakar, explicaron: "Tras sufrir un accidente en el km 12 de la etapa 3, la jaula antivuelco de su Dacia Sandrider resultó dañada. Tras una inspección por parte de los comisarios técnicos de la FIA, el equipo no está autorizado a tomar la salida de la etapa 4". De esta manera, Loeb deberá esperar un año más para poder cumplir el gran anhelo de ganar esta prueba.
Carlos Sainz abandonó el Rally Dakar por un motivo similar
El español, en tanto, se despidió de la prueba el lunes. Tras volcar, el arco de seguridad del Ford presentó un mal estado y el equipo anunció la baja en sus redes sociales: “Debido a los daños en la jaula de seguridad del vehículo número 225 de Carlos Sainz y Lucas Cruz sufridos durante el accidente ocurrido en la primera parte de la 48 Crono del Rally Dakar 2025 y siguiendo la normativa FIA, se ha decidido retirar el vehículo de la prueba”.
“El domingo tuvimos el accidente y perdimos mucho tiempo, pero es que este lunes tuvimos otro pinchazo y luego perdimos mucho tiempo en un sitio en el que no fuimos capaces de encontrar el camino”, comentó. Luego aseguró: “Fueron dos días para olvidar, muy difíciles de aceptar nada más empezar la carrera". Ante esto, por primera vez desde que Sainz y Loeb comparten pista en el Dakar (2016), ninguno de los dos terminará la competencia.