La 10 de Maipú, marcó un gol y fue la gran figura del título Mundial que logra Mendoza. A la galería de los recuerdos.
Vero Cabrera levanta la copa con Maipú, sin dudas, de las más importantes de su vida.
Todavía tiene heridas en de batalla sobre su camiseta. Vero Cabrera se agarra la cabeza sin poder creer ni dimensionar lo que acaba de lograr con su amado Maipú. El Mundial vuelve para Mendoza y la vitrina de su querido club suma la estrella más importante de todas. Con la emoción a flor de piel, la 10 habló de una final épica.
"Fue un partido difícil de explicar. Fue algo muy lindo, ante un rival muy duro. Empezamos perdiendo pero pudimos darlo vuelta, encontrando los espacios y pegando en los momentos justos", dijo la emblemática referente del fútbol de salón mendocino, camiseta al margen.
"La verdad que este torneo tuvimos la posibilidad de entrar a lo último, jugamos con potencias en el grupo como Francia, Chile y Colombia. Son rivales muy duros pero pudimos entender cómo jugarlos. Nos pasó también en la final pero demostramos que estamos que teníamos con qué y lo logramos", dijo.
El título que logró Maipú en el femenino es el segundo que gana nuestra provincia: a la estrella de las chicas se suma la corona que alcanzó Jockey Club en Brasil en la rama masculina, demostrando que Mendoza sigue con su hegemonía a nivel nacional e internacional en todas las categorías.