El papa León XIV pidió este domingo que callen las armas y que se trabaje por la paz a través del diálogo, durante el rezo del Ángelus en la Plaza San Pedro."Sigamos rezando para que en todos los lugares callen las armas se trabajen por la paz a través del diálogo", dijo ante las miles de personas.
Además expresó que su "servicio episcopal es servicio a la unidad de la Iglesia y entre las Iglesias, hermanas y hermanos, se nutre del perdón y de la confianza recíproca, que comienza por nuestras familias y nuestras comunidades. En efecto, si Jesús confía en nosotros, también nosotros podemos fiarnos los unos de los otros, en su nombre". Y pidió que los apóstoles Pedro y Pablo, junto con la Virgen María, "intercedan por nosotros, de modo que, en este mundo herido, la Iglesia sea casa y escuela de comunión".
Embed - Ángelus 29 de junio de 2025- Papa León XIV
Su mensaje central resonó en la necesidad de vivir en una constante conversión, nutriendo la unidad eclesial a través del perdón y la confianza, y reconociendo el sacrificio de aquellos que, incluso en la actualidad, testimonian su fe con la propia vida.
El agradecimiento del Papa por las donaciones al Óbolo
El pontífice estadounidense también recordó que en esta festividad también se celebra el día del Óbolo de San Pedro, donde se recogen las donaciones al papa, y aseguró que este es "un signo de comunión con el papa y de participación en su ministerio apostólico". "Agradezco de corazón a quienes con su donación apoyan mis primeros pasos como sucesor de Pedro", añadió. El papa Francisco instituyó pocos días antes de fallecer una comisión para ayudar a incentivar las donaciones a la Iglesia.
Según las cuentas de 2024, los ingresos totales en ese año ascendieron a 58 millones de euros, mientras que los gastos totales alcanzaron los 75,4 millones, con un aumento en las donaciones respecto a los 52 millones del año anterior, mientras que los gastos habían sido de 109,4 millones. La mayor parte de las donaciones, 54,3 millones de euros, provienen de la colecta anual de las parroquias en la solemnidad de los santos Pedro y Pablo, de ofrendas directas y de legados testamentarios.