La participación de la industria nacional cayó al 33% en 2025. Las importaciones de ropa lideran el consumo textil según un informe de la Fundación Pro Tejer.
En el primer trimestre de 2025, las importaciones de ropa representaron el 67% del consumo textil en Argentina, el nivel más alto de la última década.
En el primer trimestre de 2025, las importaciones representaron el 67% del consumo textil en Argentina, el nivel más alto de la última década. Mientras tanto, la producción nacional de ropa cayó a su punto más bajo desde 2015, según un relevamiento realizado por la Fundación Pro Tejer. Peligra la industria nacional.
De acuerdo al informe elaborado por la Fundación Pro Tejer, el país ha profundizado su dependencia del mercado externo en el sector textil. En 2015, el 45% del consumo aparente, es decir, lo que se produce más lo que se importa, menos lo que se exporta, era cubierto con productos importados. Hoy, esa proporción trepó al 67%.
La producción nacional pasó de cubrir el 55% del consumo en 2015 al 33% en el primer trimestre de 2025.
El quiebre más pronunciado se dio a partir de 2019, cuando por primera vez en la serie las importaciones superaron el 60%. Desde entonces, la industria local no ha logrado recuperar su participación.
El informe alerta sobre el impacto que esta tendencia tiene sobre el empleo y la cadena de valor textil, que incluye desde la elaboración de materias primas hasta la confección de prendas terminadas. Según entidades del sector, la pérdida de participación local está ligada a la apertura comercial y a la falta de incentivos para la producción nacional.
La Fundación Pro Tejer también advirtió que esta situación podría agravarse si no se adoptan medidas para proteger la industria textil, uno de los sectores con mayor capacidad de generación de empleo intensivo, especialmente en el interior del país.