La salud atraviesa un momento crítico en Mendoza. ATE ya pactó con el Gobierno y otros gremios mantienen protestas y asambleas.
Roberto Macho, líder de ATE, uno de los gremios más importantes en el sector salud.
Roberto Macho, secretario general de ATE. Foto: Prensa Gobierno de Mendoza.
En un giro significativo en las negociaciones paritarias entre el Gobierno y los gremios, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) decidió desactivar los paros y asambleas en hospitales tras aceptar la oferta del oficialismo.
Según detalló Roberto Macho, líder del gremio, la propuesta incluye un aumento del 13% al básico y un ajuste adicional del 20%, lo que permitirá a los afiliados alcanzar el costo de la canasta básica. Sin embargo, el incremento no será reflejado en el próximo salario.
Macho destacó que la oferta fue aceptada con observaciones, especialmente en relación con los montos y el cambio en la base de cálculo del mayor horario de los trabajadores de la salud. Este ajuste busca beneficiar a los empleados con menores ingresos, garantizando que puedan cubrir el costo real de la canasta alimentaria.
Por otro lado, el líder gremial lanzó críticas hacia los trabajadores autoconvocados que continúan resistiendo en hospitales como el Central, donde se ha instalado desde el viernes pasado una carpa sanitaria. "Se tienen que sacar de la cabeza esta payasada de autoconvocarse o de estar politizando el conflicto", soltó Macho.
Entre los grupos excluidos de la paritaria y que organizan protestas independientes se encuentran SITEA, SIPES y la Asamblea de Trabajadores Autoconvocados del Hospital Central, liderada por Raquel Blas, exaliada y ahora rival de Macho desde que éste se alzó con el liderazgo del sindicato, impulsado por ella misma.
Blas y otros referentes del sindicalismo -entre ellos AMPROS, de los profesionales de la salud- han cuestionado desde hace años a Macho por sus pactos con Alfredo Cornejo en su primer mandato, y con Rodolfo Suarez, una relación que se quebró en 2022, cuando fue encarcelado por protestar en plena paritaria.
Este escenario refleja las tensiones internas en el sector de la salud, donde las demandas salariales y las estrategias de negociación continúan siendo un tema central.