La Municipalidad de Guaymallén dio un paso importante en la transformación del Acceso Este, al inaugurar oficialmente su nueva Oficina Técnica de Proyecto, un espacio exclusivo desde donde se coordinará el diseño, la planificación y el seguimiento de una de las obras viales más relevantes de los últimos años en Mendoza.
Convenio necesario para ejecutar fondos
El lanzamiento estuvo encabezado por el intendente Marcos Calvente, quien recibió a Marcelo Campoy, titular de Vialidad Nacional, y a Emma Albrieu Cipollina, gerenta de Planeamiento y Concesiones del mismo organismo. Este encuentro representó la continuidad del convenio firmado en mayo entre el Gobierno de Mendoza y la Nación, que permite a la Provincia ejecutar con fondos propios obras sobre rutas de jurisdicción nacional.
En ese contexto, Calvente destacó la importancia de esta oficina como un paso concreto hacia la ejecución de una obra que transformará no solo la movilidad de Guaymallén, sino también la del Gran Mendoza. “Estamos frente a una intervención que cambiará la manera en que nos movemos. Por esta vía circulan más de 120 mil vehículos por día y necesitábamos soluciones estructurales, no parches temporales. Con esta oficina, institucionalizamos un equipo técnico que se abocará de lleno a que esta obra se haga con la calidad y el ritmo que los vecinos merecen”, afirmó el jefe comunal.
Cómo serán las obras en todo el Acceso Este
El Acceso Este, específicamente el tramo de la Ruta Nacional 7 que atraviesa Guaymallén, será objeto de una renovación integral que incluye la construcción de una tercera trocha por mano en ambos sentidos, desde la intersección con Arturo González (límite con Maipú), y la ejecución de pasos elevados en tres puntos estratégicos: Urquiza, Avellaneda y Rosario. Esta modalidad, ya implementada con éxito en el cruce de Arenales, busca eliminar semáforos, agilizar la circulación y mejorar la seguridad vial.
El proyecto también prevé la mejora del alumbrado público, la repavimentación en tramos donde ya existen tres carriles, y una renovación integral del entorno urbano: nuevas veredas, forestación, reordenamiento de servicios e incorporación de rotondas que facilitarán la movilidad interna del departamento.
La Oficina Técnica de Proyecto no es simplemente un área administrativa. Estará compuesta por un equipo interdisciplinario de ingenieros, arquitectos, urbanistas, economistas y especialistas en seguridad vial, que trabajarán de manera articulada con organismos públicos y actores del sector privado. Su función será garantizar que cada etapa de la obra cumpla con los plazos y estándares previstos, y también actuar como nexo técnico y comunicacional con los distintos niveles del Estado.
“Este no es un proyecto improvisado. Es una iniciativa que venimos planificando desde hace tiempo, con el objetivo de dar una respuesta seria a una de las principales arterias del Gran Mendoza. Nos estamos preparando para una ciudad que crece y necesita infraestructura a la altura”, aseguró Calvente.
La obra se ejecutará en tres tramos. El primero, entre Costanera y Estrada/Sarmiento, ya cuenta con tres carriles por sentido, por lo que las tareas allí serán de repavimentación, señalización y mejora del alumbrado. El segundo tramo, entre Estrada y Arturo González, demandará ampliaciones de calzada y la construcción de los mencionados pasos elevados, lo que implicará una transformación urbana de gran escala. El tercer tramo, entre Arturo González y la Variante Palmira, contempla tareas de fresado, nueva carpeta asfáltica y señalización, aunque sin ensanchamiento vial en esta etapa.
Desde la comuna remarcaron que esta intervención representa un salto cualitativo en términos de conectividad y planificación urbana. Permitirá mejorar los tiempos de viaje, aliviar la congestión en horas pico, fortalecer el transporte público y reducir la siniestralidad en una ruta que hoy muestra altos índices de uso.