Los alimentos son lo que más incide en el índice de inflación. Sin contar el alquiler, una familia necesita más de un millón para seguir en la clase media.
El alza en los precios de los alimentos es el de mayor incidencia en la medición de la inflación y el costo de vida de la clase media.
Santiago TaguaLa inflación en alimentos en Mendoza en abril fue de 3,5% y lleva 14,3% acumulada desde enero. Es, como informa la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas (DEIE), uno de los rubros ineludibles -otro es la vestimenta- para la supervivencia con mayor incidencia en el índice general y uno de los que se lleva gran porción en el presupuesto de la clase media.
En la economía doméstica de una familia tipo, dos adultos y dos niños, el gasto en alimentación básica, sin lujos sino básica, se lleva el 41% del presupuesto en Mendoza.
Para seguir siendo considerada de clase media, una familia que no paga alquiler -porque allí el número sería mayor, pero la estadística oficial no lo incluye en la medición- debe reunir 1.002.604 al mes. Es la primera vez que el número perfora el millón de pesos.
Sólo en comida una familia debe contar con 416.018 pesos al mes. Por menos de eso cae en la indigencia, según los últimos datos disponibles.
La comparación del precio de la canasta de bienes de la clase media entre los primeros cuatro meses de 2024 y 2025 revela un salto inflacionario de gran magnitud en el costo de vida para las familias mendocinas.
Según datos oficiales, la Canasta Básica Total (CBT) para un hogar tipo aumentó casi un 50% en un año, con picos del 63% en enero de 2025. Esta canasta, que perforó el millón de pesos, no incluye el alquiler, y mide la línea de pobreza.