En una jornada legislativa clave, el diputado nacional Julio Cobos sorprendió al desmarcarse de la posición mayoritaria de la UCR y aportar quórum en la Cámara de Diputados. La sesión, impulsada por la oposición, busca tratar temas sensibles como las jubilaciones, la emergencia en discapacidad y la crisis del Hospital Garrahan.
Cobos rompió con la estrategia de la UCR y respaldó el debate
Mientras el bloque radical conducido por Rodrigo de Loredo decidió no dar quórum, Cobos fue uno de los legisladores que permitió que la sesión comenzara. La oposición logró alcanzar el número necesario con el apoyo de diversos bloques y de algunos diputados que se apartaron de la línea partidaria. En Mendoza, Lisandro Nieri y Pamela Verasay se mantuvieron alineados al bloque y bajaron al recinto solo una vez iniciado el debate.
Desde el entorno del exgobernador mendocino justificaron la decisión: "Julio siempre ha sido coherente con su postura sobre los temas sensibles como la situación de los jubilados o las personas con discapacidad". De hecho, en los días previos, el propio Cobos había cruzado públicamente al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, por anticipar vetos presidenciales ante posibles cambios en materia previsional.
Críticas al Gobierno: “Del Estado ineficiente al Estado ausente”
Durante la sesión, Cobos compartió un extenso documento en el que criticó duramente el rumbo del Ejecutivo. “Este gobierno pasó de querer sanear el déficit fiscal a provocar un déficit social profundo. Las jubilaciones están por debajo de la línea de pobreza, y el sistema de salud se deteriora cada vez más”, sostuvo.
También advirtió sobre el funcionamiento institucional: “No puede haber vetos anticipados ni un Congreso deslegitimado. Sin presupuesto nacional, el Parlamento debe legislar para dar previsibilidad”. En esa línea, pidió respetar la división de poderes y “buscar un punto de equilibrio entre el orden macroeconómico y el bienestar social”.
Con esta jugada, Cobos refuerza su perfil moderado dentro del radicalismo, incluso a costa de tensiones internas, en un contexto político donde se discuten decisiones cruciales que afectan a los sectores más vulnerables.