Después de dos años sin participar en la Copa Libertadores, Boca Juniors tiene un objetivo claro: volver al certamen continental en 2026. Para eso, el equipo de Claudio Úbeda está obligado a cerrar de la mejor manera el Torneo Clausura.
Boca derrotó 3-1 a Barracas Central y a falta de tres fechas para el final del campeonato, el Xeneize sueña con regresar al plano internacional.
Después de dos años sin participar en la Copa Libertadores, Boca Juniors tiene un objetivo claro: volver al certamen continental en 2026. Para eso, el equipo de Claudio Úbeda está obligado a cerrar de la mejor manera el Torneo Clausura.
Solamente un buen desempeño en la recta final le permitirá clasificarse directamente a través de la tabla anual, o bien consagrarse campeón. La reciente victoria ante Barracas Central fue clave y mantuvo viva la ilusión. Con tres jornadas por delante, el Xeneize sigue dependiendo de sí mismo, aunque el margen de error se achicó al máximo.
Según los antecedentes recientes, el equipo debería ganar al menos dos de los tres partidos restantes, o bien obtener una victoria y empatar los otros dos, para mantenerse en zona de clasificación. De todos modos, su suerte también dependerá del rendimiento de sus competidores directos, ya que la pelea por los cupos está muy reñida.
La única forma de asegurarse al ciento por ciento su presencia en la próxima Libertadores sería sumar los nueve puntos posibles: así, Boca se garantizaría al menos el segundo lugar de la tabla anual y no dependería de otros resultados.
Otro factor clave es el posible liberamiento de cupos. El campeón del Clausura accede de forma directa al certamen continental, lo que abre una vacante adicional en la tabla anual. A diferencia de temporadas anteriores, el actual formato con playoffs aumenta las chances de que el campeón no sea uno de los equipos de arriba.