Los datos oficiales ubican a Mendoza junto a otras 4 provincias entre las menos perjudicadas por la caída del empleo. Sin embargo, el mercado laboral cruje.
En Mendoza se promociona a la minería como creador de empleo a nivel masivo, pero los datos oficiales muestran que su rol en el mercado es marginal.
Desde la asunción de Javier Milei a la presidencia, Argentina atraviesa una de las etapas más críticas en términos de empleo. La provincia de Mendoza no ha sido ajena a esta crisis, viendo reflejada la destrucción de puestos de trabajo en sectores clave de la economía.
Entre noviembre de 2023 y marzo de 2025, se perdieron más de 115.000 empleos registrados en el sector privado, lo que marca una preocupante tendencia que afecta directamente la estabilidad laboral y el crecimiento económico, según datos de la Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de Nación recopilados por el Centro de Economía Política de Argentina (CEPA).
Mendoza, a pesar de figurar dentro del grupo de provincias que lograron aumentar la cantidad de puestos de trabajo en este período, enfrenta una incertidumbre marcada por la crisis salarial y el deterioro laboral que implica ser pobre pese a tener trabajo.
Indica el informe que hasta agosto 2023, se registraron 37 meses de crecimiento sostenido del empleo registrado privado que se vieron interrumpidos en septiembre en el contexto de incertidumbre electoral, "a partir del cual comenzó un sendero a la baja. Con la asunción del nuevo gobierno, esta tendencia se profundizó, movida por el derrumbe de la actividad económica. Desde agosto de 2024, la tendencia fue errática, con meses de suba y otros de caída".
Al analizar la evolución del empleo desde la asunción de Javier Milei, se observa que la pérdida de puestos de trabajo alcanza los 115.353. De dicho total, 61.956, es decir el 53,7%, son explicados por el sector de la construcción, en el marco de la decisión política de paralizar por completo la obra pública.
En este contexto, se torna necesario incorporar al análisis la composición del empleo privado registrado en la Argentina. La construcción abarca, en marzo de 2025, como se observa en el gráfico a continuación, un 6,0% de los puestos de trabajo. La principal actividad económica en materia de empleo en el sector privado es el comercio, que reúne a 20,0% del total.
El desguace de Vialidad Nacional y la obra pública derivó en un plan de Alfredo Cornejo para que la provincia asumiera los costos de arreglos y mantenimientos, para lo cual usará los fondos de Portezuelo del Viento y cobrará peaje.
La distribución de los puestos por sector es relevante en el marco de la aprobación en el Congreso de la Nación del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) con el cual se pretende “dinamizar” el empleo: la minería, la siderurgia y los hidrocarburos.
Sin embargo, indica el reporte, "si analizamos la incidencia que tienen estos sectores sobre el empleo registrado privado, encontramos que su participación es más bien marginal: 6,7% del total".
Remarca el CEPA que el RIGi "pondría en jaque a la industria manufacturera, que genera el 18,6% del total de los puestos de trabajo, constituyendo la segunda actividad económica más importante en materia de empleo. Desde que asumió el gobierno de Milei, este sector es el segundo que más ha perdido empleo (-31.301 puestos), con una retracción de 2,6%".
El deterioro del empleo en marzo de 2025 se vio reflejado en la caída de la actividad económica (-1,8% intermensual), con siete de los catorce sectores en descenso. La industria, que representa el 18,6% del empleo privado en Argentina, perdió más de 31.000 puestos de trabajo, consolidándose como el segundo sector más afectado por las medidas gubernamentales.
En términos salariales, el panorama también es desalentador. A pesar de un incremento promedio del 1% en marzo, los ingresos continúan rezagados respecto de la inflación del mes (3,7%), deteriorando el poder adquisitivo de los trabajadores y afectando el consumo interno.
Si bien Mendoza figura entre las provincias que lograron incrementar su cantidad de puestos de trabajo, la recuperación no es homogénea. Sumado a eso, la calidad del empleo privado ha ido a la baja, con salarios que se derrumbaron por debajo del nivel de 2016, según reportan informes privados.Por otro lado, se consolida el ejército de monotributistas.
Por otra parte los empleos generados en la región no compensan la pérdida de miles de puestos en sectores estratégicos. La crisis del empleo en la provincia sigue vigente, con trabajadores desplazados y un mercado laboral que lucha contra la incertidumbre económica.
Todos los indicadores de empleo y desempleo dieron en rojo para Mendoza en la medición del cuarto trimestre de 2024 comparado al mismo período de 2023, con Javier Milei apenas sentado en el sillón presidencial.
Esto traducido a números significa que aproximadamente 25.000 personas están desocupadas en el aglomerado Gran Mendoza, que cuenta con una población económicamente activa (PEA) de alrededor de 515.000 personas. De los que tienen trabajo, cada vez son más quienes buscan otro empleo para llegar a fin de mes.